--Homicidio de una moneda de cinco céntimos--
(moderato con anima).

1:45 para el próximo tren.

Tendida, impávida y pisoteada
Mirando de cruz al sol blanco,
Gimiendo en su beso arrastrado,
Exempleada de entidades de cambio.

Tú, pobre princesa de oro falso,
Qué guardas pequeñas esencias,
Que sostienes la empresa y aventura
De los precios tajantes y molestos.

1:16 para próximo tren.

Tú, pobre cortesana mal pagada,
Sueño del fumador desesperado
Ante molesta máquina de tabaco
Que pide el precio exacto.

Tú, cuyo valor supera en creces
(y en reses) casi toda alma humana;
Tú, sueño perdido de un chicle,
Un clip, una canica o un bolígrafo… desvencijado.

0:45 para próximo tren.

Tú, bajo valor menoscabado,
Déjame llorar tu condena y descrédito;
Déjame empujarte a abismo de olvido,
Déjame acatar justicia y eximirte de los pies

Ve con las ratas y las arañas,
Que valen más que los hombres
Que serán amigas de tu brillo;
Que aclamarán tu peculiaridad

Ve con el olvido, ve con las vías,
Sé que gritas para volver a mi bolsillo
Pero sé fuerte, halla mejor camino
No permitas ser pisada de nuevo
No permitas ser pieza del sucio juego;
Amiga devaluada, ahora y siempre,
descansa en paz.

Próximo tren entra.

Señor del Esperpento
ESPAÑA
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